Fue una verdadera batalla campal entre parranderos, frente al edificio Ocando, de propiedad de los abuelos del gobernador Jairo Aguilar Ocando, al otro lado la Institución Educativa Choncay, a una cuadra del parque Centenario, zona que se ha convertido en el epicentro de encuentros de parranderos que terminan sus fiestas en plena ‘Arena Riohacha’, o sea la Calle Ancha y la Avenida Circunvalación.
Un joven, simplemente espera un taxi en compañía de sus amigos, fue atacado por otro grupo, llegó el escuadrón motorizado, intentaron poner el orden, y resultó Troya. Hubo de todo un poco, como ya es costumbre en esta zona de la ciudad, en donde no se respetan las escuelas, los parques, la Casa de los Abuelos, el coliseo Cubierto, y el emblemático Edificio Ocando de la familia del gobernador Jairo Aguilar Deluque.
Una madre desesperada fue avisada sobre lo que está ocurriendo, donde a su hijo lo hieren, le rompen el celular y le dan con varios elementos contundentes, siendo recluido en una las clinicas de la ciudad, esperando un diagnostico medicos sobre las heridas, de las cuales, los familiares señalan a un miembro de la policía.
RELATO DE UNA MADRE EN DONDE DENUNCIA LO OCURRIDO EN LA RIÑA.