17 días después, entre la empresa Enel Green Power y las comunidades wayuu en Ulapa, Alta Guajira no han podido conciliar, para que se produzca la reapertura del territorio que fue cerrado para impedir que las labores de producción de energía eólica pueda restablecida, luego que el 1 de enero, se cerraran todas las entradas al área de instalación de las operaciones.
Ulapa es una pequeña comunidad habitada por indígenas wayuu, ubicada en jurisdicción del corregimiento de Wimpeshi, en donde se instala la sede operativa de la empresa Enel Green Power, generadora de energías eólicas.
Los nativos argumentan que “en uso de sus facultades legales y constitucionales, amparados en sus sistemas normativos, deciden cerrar sus territorios ancestrales, por graves violaciones a sus Derechos Fundamentales a la vida, al territorio, al medio ambiente y por supuesto al Consentimiento Previo Libre e informado, derechos estos que aducen haber sido violados por el ingreso arbitrario de la empresa Enel Green Power, quienes habrían entrado de manera inconsulta y arbitraria a estos espacios territoriales indígenas wayuu”.
Según los lideres, en el resguardo de la alta y media Guajira se han venido presentando conflictos entre comunidades indígenas wayuu con saldos trágicos de asesinatos , desplazamientos forzosos de familias enteras, quienes han tenido que salir de sus territorios por temor a ser asesinados y todo en el marco de los proyectos de energía eólica que se levantan en el resguardo de la media y alta Guajira en contravia al Derecho Fundamental al Consentimiento Previo Libre e Informado.