La Alta Guajira se encuentra incomunicada debido al desbordamiento de los arroyos causados por las fuertes lluvias en los últimos días. Por eso en Makalou, se vivieron momentos emotivos, con mucha tensión, cuando a una mujer de la comunidad le llegó el momento de traer a una bebé al mundo.
Las fuertes lluvias y el pésimo estado de las vías, no permitieron que un vehículo llegara a tiempo a Makalou, en donde una mujer indígena, clamaba en medio de fuertes contracciones, que le ayudaran a parir a su hija. Su pequeña comunidad cercana a Castillete, en la frontera con Venezuela, se encuentra apartada del hospital de Nazareth, por eso a cada momento aumentaba la tensión.
El tiempo pasó, los dolores aumentaron, cuando a la mujer la sacaron de su vivienda para abordar el vehículo, la pequeña bebé, comenzó a asomarse al mundo. En plena vía, en medio del barro, e iluminados por linternas, y las luces de la camioneta que vino a recogerla, se hizo el milagro.
Este caso se dio cuando la joven indígena de la comunidad de Makalou, en el corregimiento de Castilletes, jurisdicción de Uribia, sintió fuertes contracciones que le avisaban que su bebé ya estaba por llegar, recibiendo la atención del equipo extramural del hospital de Nazareth, quienes la llevarían en un vehículo a un puesto de salud cercano. Dicho vehículo se encontraba en otra comunidad a dos horas de camino y por el mal estado de las vías, no pudo llegar a tiempo y la mujer dio a luz.
Hacia las 11 de la noche, en medio de la nada, torada en el suelo, junto al vehículo tipo burbuja de color blanco en el que debía ser trasladada la mujer embarazada, nació una bella niña. Allí mismo, el personal de enfermería que la acompañaba le hizo la asepsia respectiva, y le dieron atención prioritaria a la recién nacida, asegurándose que estuviera bien.
La escena del parto estuvo iluminada por la luna que salió después de intensas lluvias, y las potentes luces del carro que estacionaron a un lado de la trocha.
Horas después, la mujer y su hija fueron atendidas en el puesto de salud en la Flor de La Guajira, corregimiento de Castilletes, y que también es habitado en un 100% por indígenas de esta zona del país.