Mientras en la península de La Guajira, el hambre, la sequía, la corrupción y otros temas, cabalgan por todos los cimientos de la sociedad, en Casa de Nariño, el presidente Gustavo Petro, presentaba una excelente propuesta, nada más, que, a la reina de los Países Bajos, Máxima Zorreguieta.
La reina se reunió en el palacio de Nariño, en donde, en medio de los eventos sociales, el presidente aprovechó para presentar una propuesta que se tenía guardada.
Se trata de construir un acuerdo que permita tránsito de turistas entre el norte de La Guajira, las islas de Aruba, Bonaire y Curazao, y posiblemente República Dominicana.
A la reina, le gustó. Tomó nota, y revisará con esas regiones para enlazar a estos territorios en los anhelados intercambios turísticos, que en el pasado existieron de forma directa, pero que extrañamente desaparecieron, porque suprimieron las rutas aéreas entre el aeropuerto Almirante Padilla y las islas del Caribe.
Todos saben que la reina Máxima, es nacida en Argentina, y se casó con el príncipe Guillermo, lo que le permitió ocupar el lugar que hoy ostenta en el trono de los Países Bajo, a los cuales, pertenecen Aruba, Curacao, Bonaire, tres islas, que están separadas por apenas 45 minutos en vuelo comercial.
El tema está caliente, y deberá ser apoyado por el gobierno departamental de La Guajira, su clase política, y todos los estamentos, para revivir los vuelos directos entre la península y las islas caribeñas.
Hace unas semanas, un crucero que hacía tránsito entre Aruba y Cartagena, hizo su arribo al Cabo de la Vela, en donde los visitantes quedaron extasiados con el hermoso paisaje.
Todos recordamos que Máxima, es de nacionalidad argentina. Se enamoró del entonces príncipe Guillermo, durante una visita a una isla española. Ahora es la reina consorte de los Países Bajos, por su matrimonio con el rey Guillermo Alejandro. Es la cuarta mujer nacida en América perteneciente a la realeza europea, la tercera consorte, tras la emperatriz de los franceses Josefina de Beauharnais, nacida en Martinica, la reina portuguesa María II, nacida en Brasil, y de la gran duquesa consorte María Teresa de Luxemburgo, de origen cubano.
Mientras Máxima trabajaba en Nueva York, en 1999, una amiga de su colegio, quien conocía al entonces príncipe neerlandés Guillermo de Orange, los presentó en España, concretamente en la caseta del Real Club de Andalucía en la Feria de Abril de Sevilla. Si bien la reina Beatriz y demás miembros de la Corona aceptaron el noviazgo, la relación se convirtió en un asunto de Estado.
El presidente Gustavo Petro y la Primera Dama, la recibieron ayer en Casa de Nariño. Uno de los temas vitales abordados, fue precisamente La Guajira, para poder integrarla turísticamente con las islas caribeñas, que hacen parte de los Países Bajos.