El Niño no ha llegado y ya tiene en crisis al sector eléctrico de Colombia, que pide apoyo al gobierno nacional para evitar un apagón que afectaría por igual a todos los estratos sociales del país, especialmente en materia tarifaria y calidad del servicio. En un comunicado expedido en las últimas horas – Asocodis- la entidad que aglutina a las empresas distribuidoras y comercializadoras de energía, revela la crisis que están afrontando debido al despunte en los precios del kilovatio.
Según explica Asocodis, y analiza el periódico económico Portafolio problema de liquidez que enfrentan las firmas comercializadoras de energía se ha acentuado a causa de las demoras y falta de medidas para mitigar el efecto de los saldos acumulados por la aplicación de la opción tarifaria, así como por otras deudas de entidades estatales, las cuales agravan la exigencia en el flujo de caja y generan insolvencia.
A lo anterior se le suman otros factores como las condiciones del mercado, el Fenómeno de El Niño, la tendencia de los precios de la bolsa de energía, el incumplimiento y suspensión de suministro de energía de los contratos de las subastas de Fuentes No Convencionales de Energía Renovable (FNCER) y los niveles de oferta.
En ese orden de ideas, la agremiación alerta sobre como la situación general no solo podría afectar la operación del sector y sus agentes, sino también las inversiones requeridas para mantener “un servicio confiable y de calidad”.
Cuáles podrían ser los efectos
Entre los aspectos que se incluyen en la misiva, el gremio resalta que si bien la demanda ha venido asumiendo la remuneración del Cargo por Confiabilidad para garantizar energía en condiciones de hidrología crítica, aún persisten algunas inquietudes relacionadas con la entrada en operación de algunas plantas de generación por retrasos en proyectos.
De la misma manera, hay dudas sobre los niveles de los embalses; la logística y disponibilidad oportuna del suministro y transporte de los combustibles necesarios para la operación de las plantas de generación térmicas; entre otros puntos.
Así mismo, Asocodis expresó su preocupación por los precios que se han registrado en bolsa.
De acuerdo con la entidad, a los últimos días de agosto se reportan valores por encima de los 800 $/kWh y, con la llegada del Fenómeno de El Niño, estos podrían mantenerse o incluso incrementarse en los próximos meses, dependiendo de la duración e intensidad de este evento climático.
Por esa misma línea, se evidencian dificultades en aumentar la cobertura de la demanda regulada de las comercializadoras a causa de una estrechez entre la oferta y la demanda, cuyo comportamiento se ha visto impactado por las recientes olas de calor que se han presentado en el país.
En lo que se refiere a la exposición a bolsa, la agremiación de distribuidores de energía destaca que el promedio para el 2023 y 2024 se sitúa en 21 %. No obstante, para ese mismo periodo hay empresas que reportan un nivel en o superior al 50 %.
En ese sentido, el incumplimiento o suspensión de los contratos de suministro de energía de FNCER podría tener un efecto en la exposición de los agentes comercializadores, pues el no contar con estos proyectos implicaría un incremento de entre el 8 % y el 10 %, lo que a su vez acentuaría los problemas de solvencia de algunas firmas.
Poner el freno a estos contratos también podría ocasionar incrementos de entre el 5 % y 6 % en el costo unitario de prestación del servicio (CU) de las empresas afiliadas a Asocodis, representando sobrecostos para los usuarios de cerca de 170 mil millones mensuales durante los meses siguientes y hasta diciembre próximo.
Por otro lado, la entidad hizo énfasis en el tema de la opción tarifaria establecida en la Resolución CREG 012 de 2020, una medida que gran parte de los asociados al gremio vienen aplicando y que, sumado a las medidas del pacto tarifario, ha generado una situación de acumulación de saldos.
“Si bien la opción tarifaria ha diferido el impacto del CU real a los usuarios, es importan tereiterar la compleja situación de liquidez de las empresas comercializadoras, la cual se concentra principalmente en los saldos no recuperados derivados de la aplicación de la opción tarifaria ($ 4,9 billones)”, señala el texto.
A grandes rasgos, el gremio informó que si no se plantean medidas para solucionar los problemas de liquidez, a diciembre del 2023 los saldos por recuperar podrían ser cercanos a 10,5 9 billones de pesos, que equivalen a 3,5 años de ingreso anual de los comercializadores.
Además, teniendo en cuenta las situaciones anteriormente expuestas, alertan que el que las empresas no cuenten con los recursos necesarios para soportar los esfuerzos de caja que requieren, podría derivar en situaciones de inviabilidad e incumplimientos ante el administrador del mercado, ocasionando el inicio de procesos de limitación de suministro para sus usuarios.
Recomendaciones del gremio
Asocodis solicitó al Minergía y a la Creg tomar en consideración algunas de las propuestas de la agremiación para contribuir a proteger al mercado, a los usuarios y a las empresas, en materia de suministro, suficiencia financiera y precio.
En ese contexto, la entidad destaca la urgencia de establecer y adoptar de soluciones estructurales para resolver las dificultades de liquidez de las empresas comercializadoras asociadas a los saldos acumulados por la aplicación de la opción tarifaria.
En ese orden de ideas, las medidas permitirían evitar la presión al alza de las tarifas, las afectaciones a los usuarios, disminuir el riesgo e impacto en el flujo de caja de las empresas comercializadoras, y, en consecuencia, contrarrestar el riesgo sistémico para el sector.
Así las cosas, propone una mayor flexibilidad en la aplicación de la opción tarifaria, de manera que sea voluntaria y opcional por cada comercializador.
La medida también contempla que los porcentajes de variación (PV) puedan ser
definidos por cada agente, por nivel de tensión, por sector o por estratos, según las
condiciones y dinámica de su mercado, los compromisos regulatorios dentro de los que se encuentran los planes de inversión y la razonabilidad con la que requiera realizar la recuperación de los saldos.
Asocodis también resalta la importancia de incorporar en el Presupuesto General de la Nación del 2024 la suma de 5,1 billones de pesos, monto requerido para cubrir las necesidades de subsidios de los usuarios hasta diciembre del próximo año.
La entidad también sugiere que se explore la inclusión en el proyecto de ley del PGN 2024 algunas herramientas que permitan brindar liquidez a las empresas como: habilitar recursos de crédito y realizar prepagos de subsidios para aliviar la caja de las compañías. Además, de que se continúen realizando los respectivos anticipos según lo establece la normatividad.
De igual forma, plantea establecer un mecanismo efectivo que permita a las empresas recuperar la deuda oficial y de usuarios de bienes constitucionalmente protegidos. Esto con el objetivo de contribuir a recuperar las deudas y que estas no continúen incrementándose de manera significativa.
Ahora bien, con relación a las garantías y su optimización, la agremiación recomienda analizar los niveles actuales exigidos y explorar la posibilidad de optimizar los costos de estas garantías, pero sin poner en riesgo alguno la estabilidad del sector.